¿Es correcto llamar "guapas" a las niñas?

Al hilo de la anterior entrada no política en el blog, siempre me ha llamado la atención la costumbre de llamar constantemente "guapas" a las niñas desde pequeñas. Por un lado se dice que a las personas hay que valorarlas en su integridad, que el aspecto físico no ha de ser determinante, y por otra vamos inculcando a las niñas, desde pequeñas, la importancia de su físico.

Puede ser que ese calificativo de "guapa" sólo sea una forma de tratar a las niñas con cariño… pero para mí que ahí, voluntaria o involuntariamente, tanto quien emite como quien recibe el mensaje están procesando esa información y sacando unas conclusiones… ¿Acaso no sería mejor obviar o al menos dejar en segundo plano esa cuestión e incidir en otras? Sí, cada vez que se aborda a una niña (y niño) habría que preguntarle "¿Qué tal, que has aprendido esta semana"?, "¿sabes ya las tablas de multiplicar"?, "¿qué libro estás leyendo"?, etc., así haríamos prevalecer la importancia de la formación y el conocimiento.

Curiosamente, siendo las mujeres las más perjudicadas por el machismo son ellas quien más inciden en utilizar la palabra "guapa"; o sea, que ahí va la niña de paseo y, según coge el ascensor para salir a la calle, ya está la vecina diciendo "pero qué niña más guapa". Seguidamente, aparece la tía de la niña y "guapa" va y "guapa" viene, lo mismo que la amiga que se encuentran en el parque. Luego, de vuelta a casa, otra vecina incide en el tema… pero no tanto como la abuela cuando llega a visitar a su nieta. Cierto es que la sociedad será machista… pero no tanto como los valores que se transmiten en ciertos hogares. Es sangrante que en esta "educación" tengan un papel importante algunas mujeres, transmitiendo unos valores a hijos e hijas que a la postre contribuyen a que éstas sean menos libres. O sea, nos quejamos de la "dictadura" de la imagen… pero a la vez vamos haciendo que en las niñas cale esa idea.

Todo sea que, a fin de cuentas, las mujeres sepan, piensen o intuyan (o quizás sea el subconsciente) que el hecho de ser guapa hará que esa niña se labre un mejor futuro, de ahí que vayan trasmitiendo ese mensaje. En fin, quizás mi reflexión es exagerada; espero argumentos que me hagan verlo de otra manera. Saludos.

La marcha de Josu Jon Imaz y el nuevo escenario político vasco

El anuncio de Josu Jon Imaz de abandonar la actividad política me incita a hacer una valoración política. No obstante, quería destacar en primer lugar la alta valía política y humana de Imaz, el hecho de que su actividad política se base en unos principios éticos firmes, su respeto y reconocimiento al adversario político, su exquisito cuidado de las formas y del lenguaje (fundamental en quien tiene una faceta pública) y finalmente, por no extenderme, su despedida es otro ejemplo de su clase: un político ha de basar su quehacer en el servicio a la comunidad y "reintegrarse" en ésta cuando cree que ya ha realizado su labor pública.

Más allá de esto, la marcha de Imaz se engloba en el proceso de debate en que se haya inmerso el PNV. Es en este punto donde, coincidiendo en las principales aspiraciones manifestadas por Imaz , puedo hacer mis propias matizaciones: cualquiera estamos de acuerdo con los conceptos manejados por él (transversalidad, acuerdos entre distintos, no imponer-no impedir, moderación, etc.) pero el problema se sustenta a la hora de llevar a la práctica política estos conceptos. Curiosa ha resultado la alta valoración que se ha dado a Josu Jon Imaz, hecho que se refleja sobremanera con su marcha, por parte del españolismo (PSOE, PP, El País, El Mundo, …); sí, analizándolo detenidamente resulta que cualquier político vasco no españolista es alabado por el nacionalismo español siempre que, declarándose partidario de la libertad del País Vasco, no lleve a cabo políticas encaminadas a conseguir esa libertad. Es decir, parece que ante ciertas posiciones "radicales" se acepta como mal menor un "moderado" (calificaciones empleadas en realidad por quienes son contrario a las posturas de los partidarios de la libertad del País Vasco y tienen el afán de sembrar la división).

Al hilo de esto, y ante la marcha de Imaz y el supuesto triunfo en el PNV de las posiciones soberanistas, ya están todos los medios españoles asustados y asustando, anunciando muchos de ellos que viene el "coco", que se va a romper España, señores, ¡se va a romper España! Yo lo que creo es que el PNV no va a tomar ninguna deriva antisistema pero que sí sería conveniente es que haga las políticas precisas encaminadas a que los vascos vivan más libres. Sí, lo que no puede ser es que se mantenga el actual status quo donde los partidos nacionalistas españoles (PSOE y PP) ven como, sean cuales sean los resultados electoras en el País Vasco, siendo mayoría o minoría, se lleva a cabo la política que ellos demandan y no la de quien gana las elecciones.

En definitiva, y resumiendo, hay que ir a un escenario político donde se vean respetados los derechos de todos los ciudadanos. Prioritario, ineludible, en este camino es que ETA desaparezca y se empleen única y exclusivamente medios políticos para conseguir objetivos políticos. En el ámbito de los acuerdos políticos, lo que no es en absoluto válido, en mi opinión, es un proceso de reforma estatutaria como el realizado en Cataluña, pretendido "caramelo" al que aspira el PSOE. No, digo que
algo así no es aceptable porque vemos el resultado conseguido en Cataluña: se dice reconocer una nación… y resulta que luego no puede tener ni una triste selección deportiva. ¿A dónde vamos con eso? Como es de suponer lo que no es efectivo es que la montaña se ponga a parir y, después de múltiples espasmos y contracciones, nazca un ratón. Desde que tengo uso de razón miles de vascos hemos vivido bajo la imposición del nacionalismo español: yo no soy partidario de imponer a nadie una nación, ¿por qué entonces me han de obligar a mí a ser español? En definitiva, hay que ir hacia un escenario de resolución del conflicto vasco en el que, a diferencia de la situación actual, la legalidad reconozca, respete y salvaguarde los derechos de todos los ciudadanos vascos, y no sólo la de quienes se sienten españoles como sucede ahora, y todas las opciones políticas, incluida la que aspira a que el País Vasco sea un país más dentro de Europa, puedan llevarse a cabo efectivamente.

Muchas gracias a Josu Jon Imaz por los servicios prestados y su intachable trayectoria. Su ejemplo no cae en saco roto y el diálogo, la moderación, la tranquilidad y el sosiego presidirán la búsqueda de soluciones respetuosas para el conjunto de la ciudadanía.

¿Las guapas buscan a un millonario?

Según me hizo saber una conocida, una reciente encuesta o estudio manifestaba que las mujeres valoraban sobremanera el estatus económico de un hombre a la hora de establecer una relación y, añadido a eso, establecían una relación directa entre su mayor o menor belleza física y la posibilidad de "conquistar" a un hombre con más o menos dinero. He aquí el enlace a la noticia.

Mi conocida manifestó que esa conclusión le parecía denigrante. Bien, será así… pero, más allá de tópicos como el de que ninguna modelo se casa con un fontanero, ése no es el tema que pretendo desarrollar. No, simplemente quería manifestar, sin vergüenza, que yo SÍ BUSCO UNA MILLONARIA que me mantenga… pero no consigo "cazar" a ninguna. Oh, qué bien vivir sin pegar un palo al agua con un Martini en la mano en una tumbona al borde de la piscina privada reflexionando sobre los males que acechan al mundo y su posible solución.

En definitiva, reitero: ¡me ofrezco como gigoló! Millonarias del mundo, espabilad, oportunidades como ésta hay pocas, ¡se me rifan!, mandad vuestros "curriculums" rápidamente. Paris Hilton, te amo tal y como eres, no me pondré celoso porque lo vayas enseñando todo por ahí, Athina Onassis, no sé hacer barcos como los de tu abuelo pero te los haré de papel, Estefanía de Mónaco, ¡soy tu hombre, hazme tuyo! (es más, si me apuran diré que me conformo hasta con su hermano), Koplowitz (ambas a dos os podéis dar por aludidas), por ti robaré la primavera a la humanidad y la prenderé en tu pelo con un alfiler, Elena de Borbón, dicen que te va mal con Marichalar, no te preocupes, aquí me tienes, siempre has sido mi amor platónico… Bueno, y aquí lo dejo, que si no esto puede degenerar hasta extremos inimaginables. Ah, no soy ese tipo de hombres que sólo valoran el físico; no, creo que el amor está por encima de todo, así que acepto proposiciones de 18 a 99 años.

En espera de la mujer que me jubile, se despide atentamente, siempre vuestro,

El Lehendakari.-

No a la dictadura del deporte

Si por algo se caracteriza este blog es por la defensa de la libertad. Por tanto lanzo desde aquí un alegato en defensa de las personas que no practican deporte de una forma intensiva. ¿Acaso no es lícito ser vago?

Parece que es delito no ir a un gimnasio hoy en día. Está bien que haya gente que se relaje gastando energías en un gimnasio tras la jornada laboral... pero eso es tan respetable como dedicarse a estar tumbado en un butacón. No sé a qué viene ese “pavonearse” con superioridad “ayer estuve una hora en la elíptica”, ante lo cual uno no puede sino pensar “¿Qué ostias será la elíptica? Con ese nombre no puede ser nada bueno. Anda que pagar para sufrir...”

A ver, que no pregono el sedentarismo absoluto; no, es necesario cuidarse, pero siempre he preferido comer poco y sano que comer más y luego tener que ir a sudarlo a un gimnasio. A ver, darse un paseito, andar a diario, es muy recomendable, lo practico, pero nunca entenderé a qué viene correr ¡si no te persigue nadie! Además resulta que a casi todo el mundo que hace deporte le duele algo siempre... no me extraña, esas cosas tan bruscas son contranatura.

En fin, un respeto a quien hace deporte intensivo pero también un respeto a quienes practicamos la vida sana de otra forma; vas a comparar el gusto que da hacer cien abdominales con el de levantarse a las 11 de la mañana...

¡Viva el epicureismo! Si ya lo decían mejor que nadie los siempre añorados Kojón Prieto y los Huajalotes:

¿Qué les pasa a las mujeres con su culo?

Viene esto a cuento de que hace pocos días estaba oyendo hablar a una amiga y comentaba que durante las vacaciones había leído mucha prensa del “corazón” y le sorprendió la gran cantidad de mujeres que se operan su culo. La conversación despertó mi interés y metí baza para confirmar lo que la intución me decía: “Ah, ¿o sea que tantas se operan para quitarse culo”. A lo cual me responde sorprendida mi amiga: “No, ¡si es para ponérselo!”

Madre mía, no entiendo nada, ¿pero no había tanto complejo con los traseros por su volumen? Es lo que yo había oído... bueno, y salta a la vista al andar por la calle... Ejem, no he dicho nada.

Pues nada, que me resultó curioso. Hay quien dice que algo va mal en el mundo cuando tres cuartas partes de la humanidad no tiene qué llevarse a la boca mientras que el otro cuarto tiene que hacer dieta para controlar su peso. Discrepo, para mí eso es secundario; lo que demuestra que el mundo está loco es que la mitad de las mujeres no están contentas con su culo porque creen que les sobra y la otra mitad está deseando ponerse. Bueno, no sé si éstas son las proporciones, pero está claro que algo raro pasa. Por lo que parece somos pocos los afortunados que disponemos de un culito redondito, respingón, durito, bien puesto... en fin, la madre naturaleza, que nos ha dado una buena “percha”. Aconsejo al resto que, en vez de preocuparse tanto por su trasero, se dediquen a cultivar su interior, dicen que también es importante.

Saludos cordiales.