¿Se puede querer a una chica a la que le gusten las películas de Walt Disney?

Desde luego, si el contenido de mis entradas fuese tan interesante como mis títulos este blog estaría patrocinado por la Coca Cola y yo medio forrado ya. En cambio, la única oferta de publicidad que me ha llegado es la de una nueva edición de las novelas de Corín Tellado; la verdad que no lo entiendo, si yo nunca toco temas sentimentales...

Vamos al asunto que hoy nos congrega: resulta que ojeando la prensa he leído una noticia (bueno, más bien el titular porque, como se verá, no es un tema que me apasione) informando del cincuenta aniversario de La dama y el vagabundo ... Esto me ha hecho recordar que dejé a una chica porque le gustaban las películas de Walt Disney. Entiendo que muchos habríais hecho lo mismo ¿no?

Pues nada, resulta que a la chica le encantaba coleccionar esas películas y su mayor ilusión era viajar a Disneyland París, cosas que a mí no me emocionaban. Cada vez que hablaba de esos temas los ojos le hacían chiribitas y se enternecía sobremanera… no sé, ya digo que yo no compartía esa sensibilidad, pero es que había una cosa que no podía soportar: los celos que me entraban cada vez que hablaba del Pato Donald!!!

Fuera bromas, viene todo a cuento de que algo me separaba de esa chica. Está claro, o imagino que será así, que no se tienen por qué compartir todas las aficiones y gustos. Y claro que a mi chica le pueden gustar las pelis de Disney; es más, esto puede ser un indicativo de que la chica es tierna, dulce, cariñosa, mimosa,... cosas todas ellas que me agradan (y que se pueden dar en cualquier otra persona independientemente de que le guste ese tipo de películas). Pues eso, me gustan esas cosas en una chica… pero también un punto de picardía, ardor, morbo, malicia,... es que sólo dulzura cansa, hay que buscar alicientes. Y encontraba lo primero pero no lo segundo, algo faltaba. En fin, ya sabemos lo complicado que es el amor... las cosas no llegaron a buen puerto.

Y a todo esto, que por amor, si hay que hacer un esfuerzo se hace y veo una película de ésas. Oye, que también pensaba que era una tontería "Eduardo Manostijeras" y me encantó; vamos, que al final me entró una congoja de la leche y se me querían salir unos lagrimones... Si al final va a resultar que no hay tanta diferencia entre ver una peli de Disney o una porno: con una o con otra se te salen los lagrimones… lo que pasa que con cada una por un lado distinto. Jajaja, yo que quería hacer un post sincero sobre algunas de las cosas que busco en una mujer... y acabo así. Uff, voy a perder el poco crédito que me quedaba. Joer, pero si yo no me comporto así normalmente, al revés, soy educado en el trato con todo el mundo... no sé, esto del blog es un peligro. Me despido antes de decir más tonterías. Saludos a tod@s.