jueves, noviembre 09, 2006

¡He resucitado!

¡¡¡Cabrrrrrrrronesssssssss!!! Que os queríais deshacer de mí, ¿eh? Pues nada, aquí estoy, vivito y coleando, ¡he vuelto del otro lado! Qué susto, ¿eh? ¿Qué cómo ha sido mi experiencia con la muerte? Pues nada, puedo decir que hay mucho mito; me refiero a que yo no he visto ni una luz al final del túnel, ni antes de morir he visto como una "película" sobre mi vida (si siquiera me han puesto una porno), ni hay paraíso ni infierno, ni nada. No sé, me he quedado un poco decepcionado, o será que la muerte ya no es lo que era.

El caso es que ¡he vuelto de entre los muertos, he resucitado¡ Había pensando en fundar una religión y "forrarme" a costa de los incautos y del ansia de muchos hombres de aferrarse a cualquier esperanza sobre el más allá. Pero bueno, iban a pasar unos siglos hasta convertirme en doctrina oficial, mientras iba a ser minoría y me iban a llamar secta, así que no estoy por la labor.


Powered by Castpost

Podría deciros también que LA MUERTE es muy aburrida: al principio me recibió bien, era muy simpática y muy guapa, dulce, cariñosa, buena persona… vamos, que me enamoré de ella… pero se conoce que tenía trabajo y se tuvo que ir, pero antes hicimos un pacto. ¡Joder, qué soponcio luego!: lo único que veía era una pared a cinco centímetros de mi frente… y unos gusanos pululando por ahí… ¡Fue entonces cuando me di cuenta que estaba (enterrado) vivo! Claro que sí, he aquí la explicación de todo: resulta que me dieron por muerto cuando en realidad sólo tenía una cogorza monumental en la celebración del aniversario de mi blog. Lo último que recuerdo es que estaba en un callejón y me encontré con ella, me dijo que su nombre era LA MUERTE… No recuerdo qué pasó luego: ya no estoy seguro si me llegué a morir y pasé al otro lado o todo lo aquí narrado fueron ensoñaciones fruto del delirium tremens…

Por suerte optaron por enterrarme y no me incineraron: ¡con el alcohol que tenía en el cuerpo habría ardido todo el tanatorio! Además no podría estar contándolo como estoy haciendo ahora. Pues eso, se conoce que alguien tenía prisa por deshacerse de mí, así que tuve suerte que el féretro estaba mal cerrado. Cuando me despejé y vi lo aburrido que era eso (joder, por lo menos podían poner wifi en los ataúdes para conectarse a internet, ¿no?) pensé: "mecaguen mis muertos, qué aburrimiento, aquí no pasa nada interesante" Así que pegué un patadón, escarbé un poco y entonces sí que vi la luz… del sol. Yo, para echarme unas risas, empecé a andar como un zombi, con los brazos por delante... ¡cómo salieron despavoridos unos cuantos que estaban por allí!, jeje.

Por lo demás diré que he establecido un pacto con LA MUERTE: como hablamos, me quedo una temporada más aquí, mi niña, y luego iré a tu encuentro. A partir de entonces, estaremos juntos y seremos amantes por el resto de la eternidad, ¿vale bonita? Muy bueno el post que has escrito. En fin, el próximo aniversario del blog me lo tomaré con tranquilidad, tengo la responsabilidad de ser serio e iluminar el camino a todos mis seguidores. Muchas gracias por las condolencias recibidas pero me tendréis que aguantar una temporada más, se siente, jeje.

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Hay que ser cabrón!!!! y además te has fumao el Retiro entero o qué??? a eso le llamo yo volar...así te mueras!!!!(estoy tocando madera eh?) (al menos podías haber esperado pa el día de los Inocentes que está a la vuelta de la esquina!!!!)

10/11/06 1:01 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Ahora entiendo porque el indice de mortalidad es más alto en los hombres... porque la muerte es una mujer, claro... y a nosotras no nos engatusa como a vosotros los hombres, no hay duda de ello, todo tiene una explicación.

Pues nada, bienvenido al mundo,por cierto.. eso quiere decir que ahora tienes dos cumpleaños???

1beso

11/11/06 1:24 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

No hay nada como morir, para intentar resucitar.

Un besote, y bienvenido a la vida.

12/11/06 9:07 p. m.  
Blogger El Lehendakari said...

Sobreviviré hola. Pero no me trates así mujer, con lo mal que lo he pasado... Todo lo que cuento es real, aunque también es cierto que tengo claroscuros, no tengo control absoluto sobre todo lo que me pasó en esos días... A veces notaba que estaba como aprisionado, como atado en una camilla... qué raro, ¿no? Veía por ahí, en el mismo lugar que yo, a gente andando, hablando... uno decía que era Napoleón, el otro se creía El Cid... no sé, algo raro pasó ahí. Pero ya estoy recuperado, un auténtico milagro haber resucitado :-) Besos.

Mordandis, ya digo que no sé qué pasó... Ahí la vi, en un callejón, fue un flechazo, me cegó su mirada... No obstante he vuelto después a ese callejón y lo único que veo es una farola... a ver si es que me quedé mirando la luz y quise ver otra cosa...
Y no mujer, gracias pero no celebro dos cumpleaños, ¿no ves que todo ha venido a cuenta de una celebración? Ya no celebro ni medio! Besos.

Elvira, gracias. Sí, está bien morirse de vez en cuando, no veas lo tranquilo que se está al otro lado, no hay prisas ni estrés... bueno, seamos sinceros, por haber no hay nada, jaja. Un beso.

14/11/06 10:47 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home